Las autoridades iraquíes afirmaron que los ataques explosivos suicidas de hoy, lunes, en todo el país causaron la muerte de por lo menos 33 personas y dejaron heridas a muchas más.
En el atentado más mortal, un atacante suicida que conducía un camión cisterna dio muerte a 15 personas en una sede policial en la norteña ciudad de Baiji.
Previamente, un ataque con coche bomba causó la muerte de ocho personas, en las oficinas del gobernador de Hillah, una ciudad predominantemente chiíta, al sur de Bagdad.
Y en la capital, un atacante suicida mató a por lo menos nueve personas, cuando activó sus explosivos en el lobby de un hotel lleno de gente. Un prominente líder tribal fue muerto en la explosión. Otro ataque con bomba mató a una persona en la norteña ciudad de Mosul.
También hoy, lunes, las fuerzas estadounidenses señalaron que miembros de la coalición detuvieron a 43 presuntos terroristas durante operaciones contra líderes y operativos de al-Qaeda en el centro de Irak.