El mundo ha recibido el nuevo año con diversas celebraciones.
En un tradicional acto en Nueva York, una gigantesca esfera de cristal iluminada fue dejada caer en Time Square, marcando el comienzo de 2007 en Estados Unidos.
Aproximadamente un millón de personas se dio cita en Time Square para observar el descenso, de tres minutos, de la enorme esfera desde el asta de una bandera hasta la base, a la medianoche.
Las celebraciones del año nuevo comenzaron temprano el lunes cuando la medianoche llegó en Asia, al oeste de Europa y África y el este de Sudamérica.
Varios líderes asiáticos han recibido el 2007 con nuevas promesas de cooperación y discursos políticos.
En Japón, el primer ministro, Shinzo Abe, prometió mejorar las relaciones con China y Corea del Sur. La relación de Japón con esos dos países ha sido tensa en años recientes por la percepción de que Tokio representa mal la historia de su expansionismo militar durante la primera mitad del siglo pasado.
En China, el presidente Hu Jintao, prometió presionar por harmonía social en el país, y trabajar con otros países para resolver asuntos comunes tales como la contaminación y el crecimiento económico. Hu también destacó que tiene pensado presionar por una reunificación pacífica con Taiwán.
Sin embargo, el presidente taiwanés, Chen Shui-bian dijo que la soberanía de la isla era un asunto de su pueblo. El gobernante taiwanés declaró que la isla defintivamente no pertenece a China.