En Chicago, están previstas para hoy, jueves, las declaraciones de apertura en el caso de un comerciante acusado de canalizar millones de dólares para el grupo extremista palestino Hamas.
El juicio a Muhammad Salah comienza dos años después que él y otro hombre, Abdelhaleem Ashqar de Alexandria, Virginia, fueran arrestados en el caso.
Una tercera persona, Mousa Mohammed Abu Marzook, se encuentra prófugo y se cree que está viviendo en Siria.
Las autoridades sostienen que los hombres formaban parte de una célula con sede en Estados Unidos que lavaba fondos para Hamas y que Salah usó su ciudadanía estadounidense para facilitar la canalización del dinero para el grupo.
Fuentes oficiales dicen que los hombres participaron en una conspiración extorsionista que duró 15 años, con el fin de conseguir fondos para Hamas y sus ataques terroristas contra Israel.
Estados Unidos, Israel y la Unión Europea consideran que Hamas es una organización terrorista.