Una nueva encuesta realizada en Australia indica que más de la mitad del público quiere que el gobierno retire a los efectivos militares australianos de Iraq.
El estudio de A.C. Nielsen publicado este lunes muestra que el 59% de los encuestados apoya una retirada de Iraq, mientras que el 36% piensa que los soldados australianos deberían quedarse.
La misma encuesta muestra que el Partido Laborista australiano, en la oposición, está aumentando su ventaja sobre el gobierno conservador del primer ministro John Howard.
El líder laborista Kim Beazley ha prometido retirar los mil 300 efectivos australianos de Iraq, si gana las próximas elecciones generales, a fines de 2007.
Howard respondió a la encuesta insistiendo en que mantendrá a las tropas en Iraq tanto como sea necesario.
Él sostiene que una retirada súbita de las fuerzas de la coalición crearía mayor violencia en Iraq e imposibilitaría sus posibilidades de construir un futuro democrático.