Los ministros de Finanzas del Banco Mundial respaldaron una controvesial estrategia para luchar contra la corrupción en los países en vías de desarrollo, pero insisten en vigilar cómo se implementa.
Los ministros reunidos en Singapur dieron a conocer una declaración, este lunes, indicando que los representantes en la junta del banco tienen programado vigilar las decisiones para observar gestiones anti corrupción, con el fin de asegurar que las medidas de la institución tengan amplia base.
El acuerdo sigue a meses de tensión entre el presidente del Banco Mundial, Paul Wolfowitz, y gobiernos miembros sobre cómo controlar mejor la corrupción, sin contar con el banco como el único ente que tome decisiones.
Wolfowitz ha sido inflexible con relación a poner las medidas anti corrupción como centro del trabajo del banco.
Sin embargo, muchos países europeos están preocupados de que tales esfuerzos puedan causar lentitud en la entrega de préstamos a países pobres.