Joseph Zen, el cardenal de la diócesis católica romana de Hong Kong, dijo que el Vaticano debería suspender las conversaciones diplomáticas con China, debido al nombramiento de obispos por parte de Beijing sin la aprobación de la Santa Sede.
En una entrevista con el diario South China Morning Post, de Hong Kong, el cardenal Zen dijo que el Vaticano tiene previsto hacer una fuerte declaración en relación al tema.
El dirigente religioso dijo que el diálogo no puede continuar, y citamos, “debido a que la gente pensará que estamos listos para rendirnos”.
La Iglesia Católica en China, controlada por el Estado, ordenó un nuevo obispo el domingo, el padre Ma Yingling, y que pronto ordenará a otro, Liu Xinhong.
A los católicos en China se les permite asistirr sólo a iglesias administradas por la Asociación Patriótica Católica China, pero millones pertenecen a iglesias católicas clandestinas leales al Vaticano.
China y el Vaticano han tratado recientemente de mejorar sus relaciones. Beijing rompió relaciones diplomáticas con la Santa Sede, en 1951.