Centenares de miles de personas marchan en todo Francia, este martes, en una nueva ronda de protestas y huelgas contra una ley de empleo juvenil.
Las manifestaciones interrumpieron el servicio aéreo y de trenes de pasajeros, aunque informes de prensa indican que el transporte está funcionando mejor que durante las protestas de la semana pasada.
Los organizadores de la medida de hecho esperan que por lo menos un millón de personas se una a las marchas en París, Marsella y otras ciudades.
Las autoridades francesas emplazaron la policía antidisturbios en la capital para controlar la violencia durante las protestas.
La semana pasada las fuerzas de seguridad se enfrentaron repetidamente contra los manifestantes.
Líderes estudiantiles y sindicales convocaron a la huelga para protestar contra una nueva ley que permite a las compañías contratar empleados jóvenes por un período de prueba de dos años.
Los dirigentes tienen previsto reunirse con legisladores, el miércoles, para tratar el impasse.