Veintidós activistas pro paz establecieron un campamento cerca de la base de la Armada estadounidense en Bahía e Guantánamo, Cuba, exigiendo entrevistarse con los sospechosos de terrorismo detenidos en ese lugar.
Miembros del grupo “Testigos Contra la Tortura” llegaron el lunes a un puesto de control, a unos 8 kilómetros de la base, luego de cinco días de marcha desde la ciudad de Santiago.
Ellos han estado ayunando y orando en vigilia desde entonces, insistiendo en que continuarán su demostración hasta que se les permita acceso a los prisioneros.
El grupo, conformado principalmente por estadounidenses, sostiene que los detenidos en Guantánamo son torturados.
Las autoridades estadounidenses aseguran que los prisioneros son tratados humanamente y que, en vista de que Washington los califica de “combatientes enemigos” y no de “prisioneros de guerra”, no tienen derecho a las protecciones de la Convención de Ginebra.