El presidente Bush firmó la ley por 31 mil millones de dólares para seguridad del territorio nacional, con exhortaciones a los legisladores para que aprueben su programa para trabajadores temporarios.
Este martes, en Washington, Bush dijo que la ley incluye la contratación de más agentes fronterizos y la expansión de instalaciones de detención para mantener a los inmigrantes ilegales desde el momento en que son arrestados hasta que son deportados.
El presidente dijo, sin embargo, que la custodia de la frontera debe ser parte de un enfoque más amplio.
Bush propuso un programa para trabajadores temporarios, el cual, afirmó, permitiría que los agentes se concentraran en capturar a los contrabandistas de drogas y los terroristas, en las fronteras del país.
El secretario de Seguridad del Territorio Nacional, Michael Chertoff, dijo a legisladores en el Capitolio, que sólo medidas más severas en la frontera, no ayudarán a detener la ola de inmigración ilegal, y afirmó que se necesitará una forma legal para que los trabajadores migratorios obtengan empleo temporario en el país.
Los legisladores estadounidenses están divididos en cuanto al tema, algunos quieren que la vigilancia de la frontera sea la máxima prioridad, en tanto que otros quieren tratar primero el más complejo tema de los trabajadores indocumentados.