Grupos paramilitares colombianos suspendieron los planes para que miles de hombres depusieran las armas en protesta por una decisión del gobierno de trasladar a uno de sus líderes de arresto domiciliario a una prisión de máxima seguridad.
Las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC, dieron a conocer que los planes de desmovilización están suspendidos hasta que el gobierno redefina lo que llamó “las reglas de juego” y ofrezca garantías necesarias para restaurar la confianza. No hubo respuesta inmediata del presidente Álvaro Uribe.
El pasado viernes, el líder paramilitar Diego Fernando Murillo, fue transferido a una prisión de alta seguridad.
La medida ocurrió un día después que Uribe dijo que no extraditaría a Murillo a Estados Unidos si cooperaba con las gestiones de paz para poner fin a 40 años de conflicto armado en Colombia.