Las tropas estadounidenses llegaron en gran número este viernes a Nueva Orleáns con órdenes de disparar a matar a los saqueadores para que los servicios de emergencia puedan ayudar a las miles de personas que han quedado varadas tras el paso del huracán Katrina, informa un cable de la agencia Reuters.
Frente a la creciente amenaza de anarquía tras un desastre natural que puede haber acabado con la vida de miles de personas, el ejército de Estados Unidos se apresuró a enviar refuerzos de la Guardia Nacional.
Los saqueadores armados han actuado sin freno en esta ciudad conocida por sus músicos de jazz y los bares del Barrio Francés, desde que el lunes Katrina arrasara la costa estadounidense del Golfo de México, pero se les ha advertido que no abusen de su suerte.