El líder de Partido Unionista Protestante Democrático en Irlanda del Norte, Ian Paisley, dijo que el Ejército Republicano Irlandés ahora debe respaldar las palabras con hechos tras la promesa del grupo de deponer las armas.
El IRA anunció el jueves que abandonó formalmente su campaña de violencia de 35 años contra el gobierno británico y que ordenó a todas sus unidades a deponer las armas.
La declaración del grupo, vista por muchos en Gran Bretaña como un cambio histórico de los extremistas irlandeses, instó a los miembros del IRA a desarrollar programas enteramente políticos, democráticos y pacíficos como alternativa a la violencia.
El primer ministro británico, Tony Blair, el primer ministro irlandés, Bertie Ahern, y la administración del presidente Bush recibieron con beneplácito la medida, a la que calificaron como un paso positivo para reactivar el proceso de paz de Irlanda del Norte.
Desde 1970, los ataques y emboscadas del IRA han causado unos mil 800 muertos en Irlanda del Norte y otras partes de Gran Bretaña.