China tuvo una respuesta silenciosa después que cientos de miles de residentes de Hong Kong enviaron un mensaje de que quieren más democracia en el territorio.
La prensa pro Beijing en Hong Kong criticó la enorme marcha del jueves. Un editorial acusó a los organizadores de tratar de dividir la sociedad y desafiar al gobierno.
La agencia oficial de noticias china, Xinhuá, cita a un funcionario local quien dijo que algunos de los carteles y de los lemas de los manifestantes no reflejan el deseo de estabilidad y armonía de Hong Kong.
Xinhuá indicó que hubo muchas quejas de que los manifestantes interrumpieron el tráfico vehicular.