Japón se negó a levantar su prohibición de importar carne vacuna de Estados Unidos hasta que Washington termine la investigación respecto a su primer caso informado del mal de las vacas locas.
Tras reunirse este lunes, en Tokio, con la delegación estadounidense, funcionarios de agricultura japoneses señalaron que su gobierno quiere saber más sobre las rutas de distribución de carne de un vaca lechera infectada sacrificada en el estado de Washington.
Fuentes oficiales japonesas afirmaron que también quieren que Estados Unidos adopte procedimientos de vigilancia más estrictos para la enfermedad.
Japón es uno de más de 30 países que han prohibido el ingreso de carne estadounidense, la semana pasada, tras anunciarse que el animal en cuestión dio positivo a la prueba de encefalopatía espongiforme bovina, conocida como el mal de las vacas locas.