El Departamento de Justicia de Estados Unidos concluyó su caso en el juicio por soborno a dos hombres acusados de dar a los delegados del Comité Olímpico Internacional un millón de dólares en efectivo, regalos y favores para que Salt Lake Citiy fuera sede de los Juegos de Invierno 2002.
Tom Welch, quien encabezó la gestión para organizar los juegos olímpicos y su asesor, Dave Johnson, han sido acusados de 15 cargos federales, entre ellos soborno, chantaje sistematizado, fraude y conspiración.
Ambos podrían enfrentar hasta 75 años de prisión si son declarados culpables.
Welch y Johnson han insistido en que no cometieron ningún delito, y ambos rechazaron aceptar ofrecimientos de un acuerdo de parte del gobierno antes y después de su acusación en julio de 2000.
La defensa usó testigos de la fiscalía para argumentar que los regalos entre las ciudades que aspiraban a la sede de los juegos olímpicos eran tan común, que Salt Lake City tuvo que superar a la mejor de ellas.