Un juez británico condenó la detención de cientos de presuntos terroristas en un campamento estadounidense de prisioneros en Cuba, y calificó la detención como “un monstruoso fracaso de la justicia”.
En un discurso en Londres, el Lord de la Ley, Johan Steyn dijo que los sospechosos detenidos en la base naval de la bahía de Guantánamo estaban siendo detenidos ilegalmente porque, en sus propias palabras, han sido privados de “cualquier derecho”.
Más de 600 sospechosos están detenidos como combatientes enemigos en la instalación de la base, incluyendo nueve británicos a quienes el gobierno inglés los quiere extraditar a su país para enjuiciarlos.
La mayoría de los detenidos en Guantánamo fueron arrestados durante operaciones militares en Afganistán y otras áreas.
Funcionarios norteamericanos opinan que muchos de esos prisioneros han brindado información valiosa sobre actividades terroristas.