Una corte china sentenció a pena de muerte a dos tibetanos, luego de acusarlos de colocar una serie de bombas que explotaron en el sureste de China, cerca del Tibet.
Los hombres fueron hallados culpables de dos ataques con bombas el año pasado, que provocaron la muerte de una persona y dejó otra herida en la provincia china de Sichuan.
Ellos tambien fueron convictos por ocasionar una explosión en abril que dejó heridas otras tres personas en la capital provincial.
Las autoridades chinas dijeron que suspendieron por dos años la sentencia de muerte de uno de los hombres.