El primer ministro israelí Ariel Sharon obtuvo un nuevo mandato para liderar a su Partido Likud, en las elecciones nacionales de enero, e inmediatamente declaró que los culpables de los asesinatos de israelíes el jueves, serán llevados ante la justicia.
Resultados oficiales de las primarias del partido muestran que Sharon derrotó a su rival, el canciller israelí Benjamín Netanuayhu por más de 15 puntos porcentuales.
En su discurso de victoria, Sharon juró vengar la muerte de los israelíes asesinados horas antes en Kenia y en la ciudad israelí de Beith Shean.