Pakistán llevó a cabo su primera elección parlamentaria desde que tomó el poder el general Pervez Musharraf en incruento golpe militar en 1999.
Los centros de votación cerraron a las cinco de la tarde, hora local, mientras que la gran mayoría de las ciudades informaron de una asistencia moderada.
Por lo menos cinco personas murieron y más de 20 resultaron heridas en actos de violencia relacionados con las elecciones. Los enfrentamientos entre partidos políticos rivales ocurrieron principalmente en la sureña provincia de Sindh.
Dos ex primeros ministros, Benazir Bhutto y Nawaz Sharif, junto a varios otros importantes políticos, fueron eliminados de las papeletas de votación.