El ex presidente yugoslavo Slobodan Milosevic negó responsabilidad por las muertes en Croacia después que el país declarara la independencia de la ex Yugoslavia en 1991.
Al responder a la interrogación como testigo ante el tribuna de crímenes de guerra de La Haya, Milosevic insistió que no hubo agresión de parte de Serbia en el conflicto, el que describió como una guerra civil.
El ex líder yugoslavo dijo que a los serbios se les había impuesto la violencia. Se refirió a la persecución de los étnicos serbios por parte del régimen títere nazi en Croacia durante la Segunda Guerra Mundial e insistió en que las acciones serbias tuvieron lugar solo como auto defensa.