El líder del grupo extremista al-Shabab, basado en Somalia, fue el blanco de los ataques aéreos estadounidenses que golpearon un campamento y un vehículo la noche del lunes, según un portavoz del Pentágono.
El contralmirante de la Armada, John Kirby, señaló que los resultados del ataque todavía están siendo evaluados y que no puede confirmar si el somalí Ahmed Abdi Godane, el líder de los rebeldes, fue dado de baja.
Según Kirby, los ataques contra Godane se llevaron a cabo por las fuerzas de operaciones especiales utilizando aviones caza y no tripulados.
Agregó que EE.UU. llevó a cabo la operación basada en inteligencia “recurrible”, y que se usaron varios misiles Hellfire y bombas guiadas de precisión.
Kirby añadió que los ataques aéreos “golpearon nuestros objetivos”, y si Godane resultó muerto, sería un “golpe significativo” para la organización terrorista y sus capacidades.
Godane es también conocido como Mukhtar Abu Zubeyr y es el líder espiritual del grupo al-Qaeda.
EE.UU. ofreció una recompensa de hasta $7 millones de dólares por información que conduzca a su arresto.
El ataque se produjo 170 kilómetros al sur de Mogadiscio, donde al-Shabab entrena a sus combatientes.
Anteriormente, la embajada de Somalia en Washington aseguró en su cuenta de Twitter que el líder terrorista vinculado a al-Qaeda había muerto junto a "siete miembros de alto nivel" de al-Shabab.
Se cree que Godane es quien planeó el brutal ataque a un lujoso centro comercial de Nairobi en 2013 en el que murieron al menos 67 personas.
Testigos dijeron que aviones no tripulados estadounidenses o “drones” dispararon por lo menos cuatro misiles que destruyeron dos vehículos de al-Shabab.
El gobierno somalí dijo a la prensa local que al menos uno de los ataques se realizó en el lugar donde se encontraba Godane.
El ataque se produjo a última hora del lunes, según el gobernador de Baja Shabelle, Abdukadir Nur Sidi. De acuerdo al funcionario, dirigentes de Al Shabab y sus combatientes celebraban una reunión secreta en una localidad entre Sablaale y Dhay Tubaako, a unos 190 kilómetros al sur de la capital somalí, Mogadiscio.
Después del ataque militantes islámicos enmascarados en el área detuvieron a decenas de residentes que sospechaban estaban espiando para Estados Unidos y registraron casas cercanas, según un residente.
Aviones no tripulados han atacado integrantes de al-Shabab en el pasado, incluyendo un ataque en enero que casi impactó en el líder del grupo.