La Unión Europea dio tres meses de plazo a Grecia este viernes para resolver las "serias deficiencias" en la protección de su frontera marítima con Turquia, por donde llegan decenas de miles de migrantes.
El Consejo de la Unión Europea, que representa a los 28 países del bloque adoptó este viernes las recomendaciones de la Comisión Europea indicando que la situación pone en peligro el espacio sin fronteras de Schegen. De las 28 naciones, Grecia votó en contra y Nicosia se abstuvo.
Si Grecia no tomara medidas, la Comisión podría ordenar la restauración de controles fronterizos en el interior de la zona Schegen hasta por dos años.
La decisión allana el camino para la aplicación del artículo 26 del Código Schegen, según el cual la Comisión tiene el poder de reintroducir los controles fronterizos hasta por seis meses renovables sin exceder los dos años.
En un informe, la Comisión reconoció la presión migratoria sin precedentes a la que está sometida Grecia, por cuyo territorio en 2015 pasaron casi 900.000 migrantes que curzaron el mar Egeo, desde Turquía, pero dice que es una prioridad resolver "algunas fallas" que podrían poner en peligro el principio de libre circulación en el interior del espacio Schegen, uno de los pilares de la construcción europea.
