La empresa de la malograda cantante Jenni Rivera –Jenni Rivera Enterprises— ha sido demandada por los familiares de los cuatro pasajeros que murieron junto a ella en el accidente aéreo en México, el mes pasado.
La Diva de la Banda murió cuando el Learjet en el que viajaba rumbo a Toluca, cayó al sur de la ciudad de Monterrey, en el noreste de México, diez minutos después de despegar.
Los otros fallecidos fueron el publicista Arturo Rivera, quien no era familiar de Jenni; su maquillista Jacob Yebale; su abogado Mario Macías; su estilista Jorge Armando "Gigi" Sánchez Vásquez y dos pilotos.
"Causa muchas dudas el por qué Jenni Rivera escogería esta carcacha aérea", dijo en rueda de prensa el abogado Vance Owen, de la firma Kiel & Larson, que representa a los familiares. "La diferencia entre Rivera y nuestros clientes que es que ellos no escogieron el avión".
Según la Junta Nacional de Seguridad del Transporte estadounidense, la nave había sufrido daños graves cuando tuvo problemas para aterrizar en Amarillo, Texas, en 2005. En ese entonces, perdió el control de la dirección pero sus pasajeros no resultaron lesionados.
La demanda de carácter civil, busca una indemnización por daños y perjuicios y acusa directamente a Jenni de escoger, seleccionar, contratar, dirigir y supervisar a la empresa Starwood Management para que consiguiera la avioneta. Alegan que la artista supo o debió haber sabido cuál era el estado de la aeronave y el estatus de los pilotos.
Actualmente, la DEA se encuentra investigando a Starwood Management, establecida en Las Vegas, y aparentemente manejada por el ex convicto mexicano Christian Esquino, de 50 años, aunque algunos registros empresariales mencionan a su cuñada como la única responsable de la empresa.
La Diva de la Banda murió cuando el Learjet en el que viajaba rumbo a Toluca, cayó al sur de la ciudad de Monterrey, en el noreste de México, diez minutos después de despegar.
Los otros fallecidos fueron el publicista Arturo Rivera, quien no era familiar de Jenni; su maquillista Jacob Yebale; su abogado Mario Macías; su estilista Jorge Armando "Gigi" Sánchez Vásquez y dos pilotos.
"Causa muchas dudas el por qué Jenni Rivera escogería esta carcacha aérea", dijo en rueda de prensa el abogado Vance Owen, de la firma Kiel & Larson, que representa a los familiares. "La diferencia entre Rivera y nuestros clientes que es que ellos no escogieron el avión".
Según la Junta Nacional de Seguridad del Transporte estadounidense, la nave había sufrido daños graves cuando tuvo problemas para aterrizar en Amarillo, Texas, en 2005. En ese entonces, perdió el control de la dirección pero sus pasajeros no resultaron lesionados.
La demanda de carácter civil, busca una indemnización por daños y perjuicios y acusa directamente a Jenni de escoger, seleccionar, contratar, dirigir y supervisar a la empresa Starwood Management para que consiguiera la avioneta. Alegan que la artista supo o debió haber sabido cuál era el estado de la aeronave y el estatus de los pilotos.
Actualmente, la DEA se encuentra investigando a Starwood Management, establecida en Las Vegas, y aparentemente manejada por el ex convicto mexicano Christian Esquino, de 50 años, aunque algunos registros empresariales mencionan a su cuñada como la única responsable de la empresa.
