Sin embargo, el mandatario pidió al secretario de Seguridad del Territorio Nacional, Jeh Johnson, que vea la manera de hacer menos dolorosas las regulaciones migratorias. Así lo confirmó el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney.
“A solicitud del presidente, el secretario de Seguridad del Territorio Nacional realizará una revisión de prácticas y la aplicación de principios legales”, dijo Carney.
Obama sostuvo una reunión con seis líderes religiosos en el Despacho Oval de la Casa Blanca, donde el jefe de estado habría afirmado que "no haría nada para cambiar la ley tal y como existe actualmente", a pesar de que los esfuerzos por realizar una reforma de inmigración integral están estancados en el Congreso.
La afirmación obliga a los inmigrantes indocumentados a esperar que sean los republicanos y demócratas en el Congreso estadounidenses quienes logren ponerse de acuerdo y aprobar la ansiada reforma de inmigración.