La tasa de pobreza en Estados Unidos se mantuvo en un 15 % durante el 2011, afectando a cerca de 46.2 millones de personas. Así lo informó la Oficina del Censo, asegurando que la cifra no tuvo una disminución significativa, respecto al 15.1% reportado en 2010.
La agencia estadística indicó que la población blanca fue la menos afectada por la pobreza al pasar del 13% en 2010 al 12.8% en 2012. Mientras tanto, los afro estadounidenses registraron la tasa de pobreza más alta, pasando del 27.4% en 2010, al 27.6% en 2011, lo que significa que existen 10,92 millones de personas con ingresos por debajo de los umbrales estipulados por el Censo.
Por su parte, un 1.2% de los hispanos abandonaron la condición de pobreza en 2011, al registrar un 25.3% durante ese año, frente al 26.5% reportado en 2010. No obstante, hacen parte de la población que mayores dificultades ha tenido para salir de la crisis económica, dado que a nivel sanitario el 30,1 % carece de seguro médico, frente al 15,7% de la población general.
Sin embargo, en el 2011 cuando empezaron a ponerse en práctica algunos apartes de la reforma sanitaria del presidente Barack Obama, se presentó una mayor disminución de las personas sin cobertura médica, pasando del 16,3 al 15,7 % a nivel nacional.
La Oficina del Censo establece que una familia es pobre cuando al estar conformada por dos hijos, ingresa menos de $22.800 dólares anuales. De la misma manera, se considera que un matrimonio con un hijo está bajo el umbral de la pobreza cuando no devenga más de $18.000 dólares al año.
En este sentido, el ingreso promedio de un hogar hispano medio se redujo a $38.624 dólares en el 2011, frente a los $38.818 dólares devengados en el 2010.
Las regiones con más incidencia de pobreza en Estados Unidos son el sur, con el 16 % y el oeste con un 15,8 %, mientras que el grupo social que devenga los ingresos más bajos es aquel que no tiene ciudadanía estadounidense, un equivalente al 24 %.
La agencia estadística indicó que la población blanca fue la menos afectada por la pobreza al pasar del 13% en 2010 al 12.8% en 2012. Mientras tanto, los afro estadounidenses registraron la tasa de pobreza más alta, pasando del 27.4% en 2010, al 27.6% en 2011, lo que significa que existen 10,92 millones de personas con ingresos por debajo de los umbrales estipulados por el Censo.
Por su parte, un 1.2% de los hispanos abandonaron la condición de pobreza en 2011, al registrar un 25.3% durante ese año, frente al 26.5% reportado en 2010. No obstante, hacen parte de la población que mayores dificultades ha tenido para salir de la crisis económica, dado que a nivel sanitario el 30,1 % carece de seguro médico, frente al 15,7% de la población general.
Sin embargo, en el 2011 cuando empezaron a ponerse en práctica algunos apartes de la reforma sanitaria del presidente Barack Obama, se presentó una mayor disminución de las personas sin cobertura médica, pasando del 16,3 al 15,7 % a nivel nacional.
La Oficina del Censo establece que una familia es pobre cuando al estar conformada por dos hijos, ingresa menos de $22.800 dólares anuales. De la misma manera, se considera que un matrimonio con un hijo está bajo el umbral de la pobreza cuando no devenga más de $18.000 dólares al año.
En este sentido, el ingreso promedio de un hogar hispano medio se redujo a $38.624 dólares en el 2011, frente a los $38.818 dólares devengados en el 2010.
Las regiones con más incidencia de pobreza en Estados Unidos son el sur, con el 16 % y el oeste con un 15,8 %, mientras que el grupo social que devenga los ingresos más bajos es aquel que no tiene ciudadanía estadounidense, un equivalente al 24 %.
