La policía sueca informó el viernes que detuvo a un hombre "del que estamos particularmente interesados" en relación con el ataque mortífero con una camión repartidor de cerveza robado en Estocolmo.
El funcionario de la policía de Estocolmo Jan Evensson dijo en rueda de prensa que el hombre fue arrestado en Marsta, un suburbio del norte de Estocolmo y cerca del aeropuerto internacional de la ciudad, Arlanda.
Añadió que el hombre estaba "cerca" del lugar en el que el camión chocó en una calle peatonal de la capital sueca, provocando la muerte de cuatro personas y heridas a otras 15.
Precisó que el sospechoso fue detectado por una patrulla de la policía luego de que las autoridades publicaron su fotografía horas antes, vistiendo una capucha verde mientras estaba en la parte superior de una escalera mecánica.
Un funcionario de la policía de Suecia, Stefan Hector, dijo que la "hipótesis de trabajo" de las autoridades nacionales es que se trató de "un acto de terrorismo".
Evensson exhortó a la gente a evitar ir al centro de Estocolmo por el momento.
Ataque
Un camión arrolló este viernes a varias personas en el centro de Estocolmo antes de estrellarse contra el escaparate de una tienda por departamentos de lujo.
La policía sueca dijo que recibió llamadas de un conductor que lesionó a otras con su vehículo en la calle de Drottninggatan, en el centro de Estocolmo, una de las arterias peatonales más concurridas de la capital sueca.
El vehículo, robado a la cervecera sueca Spendrups unas horas antes, acabó finalmente empotrado en los grandes almacenes Ahlens, con la cabina ardiendo.
“Arrolló a ocho personas y ví cuatro cuerpos más adelante”, dijo una testigo. “Una mujer y su hijo pequeño se quedaron completamente paralizados. Yo la tomé del brazo y otra mujer nos lanzó contra una escalinata”, dijo.
Amplios sectores de la ciudad fueron cerradas con barricadas por la policía, el transporte público quedó suspendido y se advirtió a la gente mantenerse alejada del centro de la ciudad.
La policía sueca trabaja bajo la hipótesis única del atentado terrorista, que recuerda por su ejecución a los de Niza o Berlín, ocurridos en julio y diciembre de 2016 respectivamente.
En los años recientes, varios cientos de jóvenes suecos han viajado a Siria para unirse al grupo extremista Estado islámico, convirtiéndose Suecia en una de las fuentes más importantes de reclutamiento para ese grupo islamista.
El aparente ataque recuerda además los comentarios del presidente Donald Trump hace unos dos meses, por los que fue ridiculizado al referirse a un ataque terrorista inexistente en Suecia.
De confirmarse que se trata de un ataque terrorista, sería la primera vez desde 2010 que la usualmente pacífica nación escandinava, sufre un atentado de este tipo. En esa ocasión un ciudadano sueco nacido en Irak hizo explotar dos bombas en Estocolmo, pero solo él murió en el atentado.
Suecia mantuvo hasta hace poco una política de puertas abiertas a los refugiados, lo cual permitió la llegada de unos 163.000 solicitantes de asilo que huyen de las guerras en Medio Oriente, África y Afganistán.
