Expertos iniciaron la histórica renovación del lugar donde según la tradición Jesús fue sepultado, una vez que cristianos de varias denominaciones dejaron de lado viejas rivalidades para realizar las primeras reparaciones al sitio en más de 200 años.
La estructura -decorada con candelabros, columnas y enormes antorchas- fue construida sobre el lugar donde según la tradición cristiana el cuerpo de Jesús fue cubierto con una manta y enterrado antes de su resurrección. Está a unos cientos de metros del lugar donde fue crucificado.
La iglesia, caracterizada por recintos en penumbra, escalones adoquinados y adornos de oro, es uno de los santuarios más venerados del cristianismo.
Los católicos, los griegos ortodoxos y los armenios tienen cada uno responsabilidades para la preservación del lugar y cada denominación defiende férreamente su cuota.
Las tres denominaciones cristianas comparten la jurisdicción sobre la estructura y se rotan para practicar sus oraciones a distintas horas del día y la noche, por lo cual reparar el Edículo era en el interés de todos.
