La reina Isabel II, la monarca británica de mayor edad y la que más tiempo ha reinado celebró este jueves su cumpleaños número 90 pasando el día en el castillo de Windsor, al oeste de Londres, con sus perros, una pequeña caminata para saludar a quienes le expresaban buenos deseos y una fiesta familiar, mientras la nación rendía tributo a su servicio y vigor.
Su gobierno y los súbditos realizaron un saludo de armas, fuergos artificiales y discursos en el Parlamento en honor de la reina, y se televisaron escenas destacadas de la vida real que se han extendido desde el clamoroso siglo XX hasta la era del Internet.
“Su majestad ha sido firme, una roca de fortaleza para nuestra nación, para nuestra mancomunidad y en muchas ocasiones para todo el mundo”, declaró el primer ministro británico, David Cameron.
Agregó que la reina “ha vivido a través de tiempos extraordinarios”, desde la Segunda Guerra Mundial hasta la llegada del hombre a la luna, el fin de la Guerra Fría y la paz en Irlanda del Norte.
Cameron encabezó los tributos a la monarca el jueves en la Cámara de los Comunes donde destacó su “inquebrantable sentido del deber” indicando que la reina ha proveído asesoría a 12 primeros ministros británicos y ha conocido a un cuarto de todos los presidentes estadounidenses.
Durante la noche el edificio del Parlamento será iluminado de rojo, blanco y azul, los colores de Union Jack, como se le conoce a la bandera británica.
Nacida como la princesa Elizabeth el 21 de abril de 1926, se convirtió en reina a los 25 años tras la muerte de su padre, el rey Jorge VI, en 1952.
