El presidente estadounidense Barack Obama dijo a los miembros de la comunidad de inteligencia de Estados Unidos que "todos sangramos cuando perdemos una vida estadounidense".
Obama, en un discurso con motivo del décimo aniversario de la Oficina del Director de Inteligencia Nacional, dijo que "a todos nos aflige cuando se toma cualquier vida inocente. Nosotros no tomamos este trabajo a la ligera. Y sé que todos y cada uno de ustedes entienden la magnitud de lo que hacemos y lo que está en juego".
Los comentarios de Obama ocurren un día después de que la Casa Blanca confirmó la muerte de dos rehenes, el estadounidense Warren Weinstein y el italiano Giovanni Lo Porto, en una operación antiterrorista de EE.UU. en Pakistán
El mandatario estadounidense dijo que cuando le preguntan cómo se absorbe una noticia así, dijo la verdad .
"Fue difícil", señaló.
Previamente el viernes, el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, dijo que el gobierno no llamaría la operación que mató a dos rehenes un "accidente", ya que cumplió con su misión de eliminar líderes de Al Qaida.
Earnest dijo que la muerte de Weinstein fue una “consecuencia involuntaria trágica”.
Funcionarios estadounidenses dicen que Ahmed Farouq, un estadounidense que la Casa Blanca dice que era un líder de Al Qaeda, murió en la misma operación.
Los funcionarios también han llegado a la conclusión de que Adam Gadahn, un estadounidense que había servido como portavoz de la red terrorista, fue asesinado en una operación estadounidense separada en enero.
"Mientras tanto Farouq y Gadahn eran miembros de Al Qaeda, ninguno fue atacado directamente", señaló en un comunicado la Casa Blanca, agregando que no había "información que indicaba su presencia en los sitios de estas operaciones".
