Estados Unidos prepara el despliegue de otros 250 soldados en Siria, ampliando la presencia estadounidense en tierra a unos 300 militares.
El presidente Barack Obama dijo durante su discurso en la feria de Hanover el lunes, que 250 comandos se integrarán a las fuerzas para combatir al grupo terrorista Estado islámico, que opera tanto en Siria como en la vecina Irak, donde las fuerzas estadounidenses pronto excederán las 4.000.
“No van a liderar la pelea en el campo de batalla, pero serán esenciales para proporcionar entrenamiento y asesoramiento para hacer retroceder a ISIS”, dijo Obama.
Añadió que Estados Unidos no puede ganar la batalla por sí solo sino que debe confiar en una “Europa fuerte que lleve parte de la responsabilidad” por la seguridad compartida.
El domingo, el presidente hizo un llamado a los partes en conflicto en Siria a regresar a la mesa de negociaciones patrocinada por Naciones Unidas, pero al mismo tiempo, se opuso a la creación de una “zona segura” en Siria.
“El tema de rodear una zona de seguridad en territorio sirio no es un asunto al que oponga por razones ideológicas… Es un tema muy práctico, en el que la pregunta es ¿cómo lo hacemos? Y quién va a poner el montón de soldados dentro de Siria. Y de cómo hacemos para que entre la gente a la zona. Y cómo hacer para que puedan entrar y salir. Y de cómo monitorearla”, dijo Obama.
El mandatario reiteró que la mejor solución para proteger a la gente en Siria es regresar a la negociación política y a una solución política que permita que todas las partes depongan las armas y a la creación de un gobierno inclusivo y representativo que Siria necesita desesperadamente.
