Enlaces para accesibilidad

Obama pone fin a la guerra en Irak


Obama habló desde la oficina Oval, en la Casa Blanca, sobre la retirada de las tropas estadounidenses de Irak y el futuro de Estados Unidos.
Obama habló desde la oficina Oval, en la Casa Blanca, sobre la retirada de las tropas estadounidenses de Irak y el futuro de Estados Unidos.

El presidente de Estados Unidos hizo el histórico anuncio de que puso fin a la participación de Estados Unidos en la guerra de Irak.

Siete años y cinco meses después de que las operaciones de combate se iniciaran, Obama dijo que llegó el momento para que Irak decida su propio futuro.

“Esta noche, anuncio que la misión de combate de Estados Unidos en Irak ha concluido. La Operación Libertad de Irak ha terminado, y el pueblo iraquí ahora tiene la responsabilidad primordial de la seguridad de su país. Ésa fue mi promesa al pueblo estadounidense como candidato a la presidencia”, dijo Obama en un discurso que duró poco más de 20 minutos.

El presidente estadounidense recordó que el futuro de EE.UU. depende de cada estadounidense, y no de los resultados que se obtengan en guerras foráneas.

“Este momento histórico debe servir como recordatorio para todos los estadounidenses de que nuestro futuro está en nuestras manos si avanzamos con confianza y determinación. También debe ser un mensaje al mundo de que Estados Unidos de América tiene la intención de retener y fortalecer su liderazgo en este nuevo siglo”, dijo Obama.

En el segundo mensaje televisado en vivo de Obama, en horario central, desde que asumió la presidencia, el mandatario agradeció a todos los soldados que “prestaron servicios con valentía” y señaló que “estoy orgulloso de los servicios prestados. Como todos los estadounidenses, admiro sus sacrificios y los sacrificios de sus familiares”.

Dos visiones sobre el anuncio

En el programa “A Fondo” de la Voz de América, Michael González, vicepresidente de de la Fundación Heritage y Javier Cuebas, consultor de desarrollo institucional, ofrecieron dos visiones bien diferentes sobre las implicancias del anuncio realizado por el mandatario.

En opinión de Cuebas, “el presidente y su gobierno están dejando un Irak soberano, estable y autosuficiente, sobre todo promoviendo que se logre un gobierno de coalición, un gobierno de los iraquíes”.

También destacó que “el presidente demostró en su mensaje el cambio en la relación con Irak y con el pueblo iraquí”, a lo que definió como “una relación de respeto, de igual a igual. El pueblo iraquí es un pueblo orgulloso, con miles de años de historia y que ahora necesita ahora tomar ese respeto para trabajar en la meta de fortalecer su democracia”.

En cambio González calificó al discurso del mandatario como “raro”. En su opinión el presidente demócrata “es un político disminuido”, cuyo porcentaje de aprobación ha caído dramáticamente, al punto que “según Gallup cuenta con un 42% de aprobación”.

Sin embargo, para González el discurso del mandatario, antes de las elecciones legislativas de noviembre próximo, “no apeló al voto conservador ni al voto moderador que ya lo ha perdido, ni al voto izquierdista que le reclama que también retire las tropas de Afganistán”. Desde su óptica el presidente solamente “recordó que cumplió una promesa electoral”, pero en definitiva “no fue tan lejos para un lado ni para el otro y no ha logrado ganar ni siquiera 5 puntos” de aprobación.

También González recordó que “no se puede decir si la guerra ha terminado porque aún hay tropas en irak y no sabemos qué va a suceder”.

Para Cuebas en cambio, es relevante que el presidente haya definido claramente que “al Qaeda es el enemigo de Estados Unidos al igual que el Talibán” y si bien reconoció que las encuestas revelan que “el país quiere cambios”, también dejó claro que “los votantes cambian, y ya no ocurre aquello que era común antiguamente cuando el Congreso mantenía la misma estructura durante cuarenta años”.

Respecto a la definición de Afganistán como prioridad, Michael González, vicepresidente de la Fundación Heritage, valoró que “Afganistán se puede ganar y en ese caso el presidente está haciendo lo necesario”. También destacó que “he vivido en Afganistán y he hablado con algunas personas en el país que me han dicho que las cosas allí van más o menos bien”.

Cuebas en tanto agregó que “es clave que se concentren los esfuerzos en Afganistán. La historia ya ha demostrado que es una de las regiones más volátiles del mundo”, por tanto, “reforzar las estructuras gubernamentales civiles” es fundamental, “porque ningún plan va a funcionar si esas estructuras no son sólidas”.

La economía

El presidente Obama finalizó su discurso explicando que su gobierno enfocará total atención en la recuperación económica del país, en la educación para niños y jóvenes así como en el desarrollo de nuevas tecnologías para que las compañías locales puedan competir en la economía mundial.

“Terminar esta guerra es de interés no sólo para Irak, sino también para nosotros. Estados Unidos ha pagado un enorme precio para poner el futuro de Irak en las manos de su pueblo. Hemos enviado a nuestros jóvenes, hombres y mujeres a hacer enormes sacrificios en Irak, y hemos gastado vastos recursos en el extranjero en momentos en que nuestro presupuesto nacional está ajustado. Hemos perseverado porque compartimos esta convicción con el pueblo iraquí: la convicción de que de las cenizas de la guerra puede nacer algo nuevo en esta cuna de la civilización. En este notable capítulo de la historia de Estados Unidos e Irak, hemos cumplido con nuestra responsabilidad. Ahora es el momento de pasar la página”, explicó el mandatario estadounidense.

El presidente dijo además que su responsabilidad como presidente de la nación es lograr que los “millones de estadounidenses que han perdido su empleo, vuelvan a trabajar”.

En tan sentido el asesor en desarrollo institucional, Javier Cuebas, destacó que “el presidente ha dejado claro que la inversión ahora tiene que ser doméstica”, porque lo que las encuestas están revelando en definitiva es que “la gran preocupación de los estadounidenses es que haya inversión en el país, que se creen empleos. La gran preocupación de los estadounidense es el bolsillo”.

En cambio, Michael González criticó el enfoque de la conducción de la economía del gobierno del presidente Obama y recordó que “la inversión gubernamental no crea puestos de trabajo. Lo que sería bueno ahora que no se está gastando en la guerra en Irak, es bajar los impuestos para que las empresas privadas puedan crear empleos. En 19 meses de gobierno el aumento del gasto del estado no ha dado ningún resultado”.

En Irak más de cuatro mil soldados estadounidenses perdieron la vida en combate, mientras que casi 15 mil iraquíes civiles murieron desde que el ex presidente George Bush, declarara la guerra el 20 de marzo de 2003.

XS
SM
MD
LG