En sus conversaciones con la OTAN, el presidente Obama reafirmará a los aliados el apoyo de EE.UU. y exhortará a los miembros a proveer asistencia al gobierno ucraniano.
Posteriormente el mandatario estadounidense viajará a Italia, donde será recibido por el papa Francisco en el Vaticano.
El martes, Obama dijo a los periodistas tras una cumbre nuclear en La Haya que Rusia estaba actuando por debilidad en su anexión de Crimea.
Agregó que la comunidad internacional nunca reconocerá la toma de Crimea por parte de Rusia, pero que una respuesta militar de Occidente era improbable.
El lunes, el presidente Obama y los líderes de Gran Bretaña, Canadá, Francia, Alemania, Italia y Japón dijeron que suspendían la participación de Rusia en el G-8, hasta que Moscú cambiara su curso.