Apenas unos cuantos centenares de manifestantes se dieron cita este lunes por la mañana en el distrito financiero de Nueva York para conmemorar con demostraciones un año de la protesta Occupy Wall Street, pero sin mostrar el fervor y la magnitud que lograron tener las manifestaciones que dieron origen al movimiento.
Los activistas prometieron interrumpir el tránsito vehicular de la mañana en el bajo Manhattan, como parte de una serie de acciones del aniversario realizadas en varias ciudades del país. El Nueva York fueron arrestados más de 100 cuando intentaban forzar el cierre de la Bolsa.
El grupo se reunió cerca del Parque Zuccotti, que el año pasado se convirtió en la base del movimiento Occupy Wall Street, donde se instalaron con carpas.
Pero un año parece haber sido mucho. El movimiento se ha ido extinguiendo en medio de luchas internas y acusaciones de que sus miembros son patriarcales, racistas y autoritarios. Nadie pudo convenir en nada y nadie está al mando por esa misma razón. Los moderadores se declararon en huelga y pronto fueron seguidos por las personas que llevaban las minutas. Después, las reuniones también se suspendieron.
El año pasado, Occupy Wall Street sorprendió al mundo con un campamento espontáneo en el bajo Manhattan, que llamó la atención sobre la economía y el poder del mundo financiero.
Pero ahora ya nadie sabe para qué sirve el movimiento y muchos se han alejado desilusionados.
En conmemoración, se realizaron otras actividades también durante el fin de semana, aunque la convocatoria nunca fue mayor que varios cientos de personas.
Los activistas prometieron interrumpir el tránsito vehicular de la mañana en el bajo Manhattan, como parte de una serie de acciones del aniversario realizadas en varias ciudades del país. El Nueva York fueron arrestados más de 100 cuando intentaban forzar el cierre de la Bolsa.
El grupo se reunió cerca del Parque Zuccotti, que el año pasado se convirtió en la base del movimiento Occupy Wall Street, donde se instalaron con carpas.
Pero un año parece haber sido mucho. El movimiento se ha ido extinguiendo en medio de luchas internas y acusaciones de que sus miembros son patriarcales, racistas y autoritarios. Nadie pudo convenir en nada y nadie está al mando por esa misma razón. Los moderadores se declararon en huelga y pronto fueron seguidos por las personas que llevaban las minutas. Después, las reuniones también se suspendieron.
El año pasado, Occupy Wall Street sorprendió al mundo con un campamento espontáneo en el bajo Manhattan, que llamó la atención sobre la economía y el poder del mundo financiero.
Pero ahora ya nadie sabe para qué sirve el movimiento y muchos se han alejado desilusionados.
En conmemoración, se realizaron otras actividades también durante el fin de semana, aunque la convocatoria nunca fue mayor que varios cientos de personas.
