Una matanza de campesinos perpetrada por narcoparamilitares en el noroeste de Colombia dejó 10 personas muertas, según dijeron las autoridades.
El homicidio colectivo, que en principio las autoridades atribuyeron a la banda conocida como "Los Rastrojos", fue perpetrado el miércoles hacia las seis de la tarde (2300 GMT) en una finca del municipio de Santa Rosa de Osos, departamento de Antioquia, a unos 275 kilómetros al noroeste de Bogotá, dijo telefónicamente a The Associated Press Santiago Londoño, secretario de gobierno de Antioquia.
Según la policía tres sujetos llegaron a la finca como a las 6 de la tarde, cuando los trabajadores estaban por retirarse, preguntaron si pagaban “vacuna” o extorsión, y ante la respuesta de que no, dispararon indiscriminadamente.
Entre los muertos se cuenta a nueve hombres y a una mujer con edades de entre 30 y 40 años, y hay otro trabajador herido.
Las autoridades ofrecieron el jueves una recompensa de 27.500 dólares a quienes ofrezcan información que permita ubicar a los autores intelectuales y materiales de la matanza.
En tanto, el alcalde de Santa Rosa de Osos, Francisco Jair Lopera, comentó telefónicamente que al parecer, el dueño de la finca estaba siendo víctima de extorsión a cambio de permitirle trabajar. "También extorsionan a pequeños campesinos productores de leche y gente que tiene tomateras en pequeña escala", sostuvo.
"Es el típico acto de barbarie que no puede tener explicación y que merece toda nuestra atención y toda nuestra decisión, y allá estaremos", dijo a la emisora local Blu Radio el ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón.
El homicidio colectivo, que en principio las autoridades atribuyeron a la banda conocida como "Los Rastrojos", fue perpetrado el miércoles hacia las seis de la tarde (2300 GMT) en una finca del municipio de Santa Rosa de Osos, departamento de Antioquia, a unos 275 kilómetros al noroeste de Bogotá, dijo telefónicamente a The Associated Press Santiago Londoño, secretario de gobierno de Antioquia.
Según la policía tres sujetos llegaron a la finca como a las 6 de la tarde, cuando los trabajadores estaban por retirarse, preguntaron si pagaban “vacuna” o extorsión, y ante la respuesta de que no, dispararon indiscriminadamente.
Entre los muertos se cuenta a nueve hombres y a una mujer con edades de entre 30 y 40 años, y hay otro trabajador herido.
Las autoridades ofrecieron el jueves una recompensa de 27.500 dólares a quienes ofrezcan información que permita ubicar a los autores intelectuales y materiales de la matanza.
En tanto, el alcalde de Santa Rosa de Osos, Francisco Jair Lopera, comentó telefónicamente que al parecer, el dueño de la finca estaba siendo víctima de extorsión a cambio de permitirle trabajar. "También extorsionan a pequeños campesinos productores de leche y gente que tiene tomateras en pequeña escala", sostuvo.
"Es el típico acto de barbarie que no puede tener explicación y que merece toda nuestra atención y toda nuestra decisión, y allá estaremos", dijo a la emisora local Blu Radio el ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón.
