Como una epidemia, calificó la Organización Mundial de la Salud las cifras de homicidios en América Latina. La región se está convirtiendo en la que registra el mayor número de asesinatos en el mundo y varios diagnósticos concluyen que las causas van mucho más allá de la expansión de negocios del narcotráfico y el crimen organizado.
El registro que llevó al organismo a hacer esta afirmación fue una tasa de diez homicidios por cada 100 mil habitantes en promedio. Según el exministro del Interior de Perú, Gino Costa, Ex ministro del Interior de Perú, en muchos países el promedio supera los 10 e, incluso, los 20 casos.
Dentro de la región, hay diferencias marcadas justamente, por esos índices de homicidios, pero también por otros indicadores, que el exministro del interior del Perú, ha analizado en sus estudios sobre seguridad ciudadana en Latinoamérica. Entre ellos, los niveles de victimización y la confianza de la población en instituciones como la policía y las cortes de justicia.
“El triángulo norte de Centroamérica y Venezuela son los más afectados en los últimos años”, señala Gino Costa, quien reitera que las rutas del tráfico de drogas señalan una clara tendencia en las ciudades por las que cruza este fenómeno.
“Más de 50 ciudades afectadas, con excepción de las ciudades de Brasil, están dentro de la categoría de ‘epidemia’ que sufren por las tasas de homicidio. Y casi todas están en las rutas del tráfico de drogas y de armas”, declaró Costa.
Por su parte, el exministro Costa dice que “Naciones Unidas ha señalado que el tráfico de drogas no alcanza a ser sino la cuarta parte de lo que genera las altas tasas de homicidios”.
Sin embargo, no todas las causas para esos niveles de violencia están relacionadas con el narcotráfico. Eel exministro Costa dice que “Naciones Unidas ha señalado que el tráfico de drogas no alcanza a ser sino la cuarta parte de lo que genera las altas tasas de homicidios”.
Según investigaciones, como la del periodista Steven Dudley, un sinnúmero de factores, entremezclan lo que muchos denominan un caldo de cultivo propicio para la comisión de conductas criminales.
"Pobreza, más debilidad de la justicia, tráfico de drogas y el acceso a armas, dan como resultado, altas tasas de homicidio", señala el periodista investigador.
Sumados a estos factores, que no tienen que ver únicamente con la pobreza o con la falta de educación, hay otros que inciden en la comisión delictiva, que pasan por la corrupción, la falta de una ética social y hasta la falta de voluntad política.
El registro que llevó al organismo a hacer esta afirmación fue una tasa de diez homicidios por cada 100 mil habitantes en promedio. Según el exministro del Interior de Perú, Gino Costa, Ex ministro del Interior de Perú, en muchos países el promedio supera los 10 e, incluso, los 20 casos.
Dentro de la región, hay diferencias marcadas justamente, por esos índices de homicidios, pero también por otros indicadores, que el exministro del interior del Perú, ha analizado en sus estudios sobre seguridad ciudadana en Latinoamérica. Entre ellos, los niveles de victimización y la confianza de la población en instituciones como la policía y las cortes de justicia.
“El triángulo norte de Centroamérica y Venezuela son los más afectados en los últimos años”, señala Gino Costa, quien reitera que las rutas del tráfico de drogas señalan una clara tendencia en las ciudades por las que cruza este fenómeno.
“Más de 50 ciudades afectadas, con excepción de las ciudades de Brasil, están dentro de la categoría de ‘epidemia’ que sufren por las tasas de homicidio. Y casi todas están en las rutas del tráfico de drogas y de armas”, declaró Costa.
Por su parte, el exministro Costa dice que “Naciones Unidas ha señalado que el tráfico de drogas no alcanza a ser sino la cuarta parte de lo que genera las altas tasas de homicidios”.
Sin embargo, no todas las causas para esos niveles de violencia están relacionadas con el narcotráfico. Eel exministro Costa dice que “Naciones Unidas ha señalado que el tráfico de drogas no alcanza a ser sino la cuarta parte de lo que genera las altas tasas de homicidios”.
Según investigaciones, como la del periodista Steven Dudley, un sinnúmero de factores, entremezclan lo que muchos denominan un caldo de cultivo propicio para la comisión de conductas criminales.
"Pobreza, más debilidad de la justicia, tráfico de drogas y el acceso a armas, dan como resultado, altas tasas de homicidio", señala el periodista investigador.
Sumados a estos factores, que no tienen que ver únicamente con la pobreza o con la falta de educación, hay otros que inciden en la comisión delictiva, que pasan por la corrupción, la falta de una ética social y hasta la falta de voluntad política.
