Funcionarios del Departamento de Justicia dijeron haberse reunido el martes con la familia de Freddie Gray, el joven negro que murió por las lesiones en la médula espinal luego de ser aprehendido por la policía de Baltimore.
Los funcionarios también dijeron que representantes de una oficina especializada en mediar en conflictos entre los departamentos de policía y las comunidades también se han apersonado en Baltimore y se han reunido con residentes que comparten la preocupación por una falta de confianza en las autoridades.
Separadamente, el departamento dijo que los resultados de una revisión de las prácticas del uso de la fuerza en el Departamento de Policía de Baltimore podrían ser anunciados en las semanas entrantes.
El departamento también dijo que ha comenzado una investigación sobre la posible violación de los derechos civiles en la muerte de Gray.
En una reflexión sobre la violencia, líderes comunitarios y otros dejaron entrever que la agitación rebasaba un problema de racismo o el proceder policial, y que es un reflejo del elevado desempleo, la alta tasa de delincuencia, la mala situación de la vivienda, escuelas en mal estado y la falta de oportunidades en los vecindarios marginales de Baltimore.
En una entrevista el miércoles en "The Steve Harvey Morning Show", el presidente Barack Obama dijo que los disturbios en Baltimore muestran que la policía necesita mejorar la confianza entre las comunidades de negros para hacer "responsables a las personas cuando hacen algo mal".
El mandatario agregó que la recién juramentada fiscal general, Loretta Lynch, está acercándose a los alcaldes para conocer sus recursos para capacitar a policías y proveerlos con cámaras.
Agregó que también deben abordarse temas sociales subyacentes como una educación pobre, las drogas y limitadas oportunidades de empleo.
