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Francia: medidas de austeridad


El primer ministro francés, Francois Fillon, advirtió que las medidas son de las más duras que han tomado en más de medio siglo.

El gobierno francés anunció duras medidas de austeridad el lunes 7 de noviembre, a medida que crecen temores de que los problemas fiscales de Europa puedan afectar a otros miembros de la eurozona, compuesta por 17 naciones.

El primer ministro francés, Francois Fillon, advirtió que las medidas, que prevén miles de millones de euros en recortes de gastos y aumento de impuestos, son de las más duras que han tomado en más de medio siglo.

Fillon dijo en una conferencia en la que dio a conocer las medidas que la palabra “bancarrota” ya no es un término abstracto. Agregó que la soberanía económica, financiera y social de Francia exige un esfuerzo colectivo y algunos sacrificios.

El plan incluye elevar la edad oficial de jubilación a 62 en 2017, un año antes de lo esperado. Otras medidas incluyen aumentar el valor agregado y los impuestos de negocios, con el objetivo general de eliminar el déficit presupuestario del país para 2016.

A seis meses de las elecciones presidenciales, es probable que el plan erosione aún más la popularidad del presidente francés Nicolas Sarkozy.

El principal partido opositor de Francia, el Partido Socialista, y los líderes sindicales no se hicieron esperar para criticar los recortes. Jean-Claude Mailly, dirigente sindical de Fuerza Obrera, criticó el plan de austeridad por lastimar a los contribuyentes. Lo que Francia y los otros países europeos no es más austeridad, sino más crecimiento económico, sostuvo.

Ese sentimiento es compartido por analistas como Simon Tilford, economista jefe del Centro para la Reforma Europea en Londres.

“La recuperación (francesa) ya se ha paralizado y está volviendo a caer en una recesión”, dijo. “Este no es el momento para que cualquier gobierno recorte el gasto. Lo único que arriesga es llevar la economía aún más hacia una recesión”.

Las medidas de austeridad fueron anunciadas al tiempo que la vecina Italia amenaza con convertirse en la última víctima de la crisis de la eurozona.

El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, se encuentra bajo una creciente presión para que renuncie a su cargo, mientras dirigentes de su coalición de Gobierno se alejan de su lado en anticipación a una votación parlamentaria clave.

Los medios italianos, incluso los diarios más cercanos al Gobierno, daban por hecho la renuncia del primer ministro Berlusconi, tras lo que se percibe como una derrota en la cumbre del G-20 en medio de una intensa presión por parte de los mercados financieros.

El economista Simon Tilford alertó que no es descabellado pensar que en unos meses Francia pueda encontrarse en una posición similar a Italia.

Francia anunció las medidas para apretar el cinturón pocos días después que el presidente Sarkozy presidiera la cumbre del G-20 en Cannes, que estuvo dominada por los problemas de deuda en Europa, con Grecia e Italia en la primera línea de la crisis.

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