El cubano estadounidense René Gonzáles, uno de los cinco miembros del grupo de inteligencia castrista “Red Avispa” y quien estuvo preso 13 años en Estados Unidos por espionaje solicitó el lunes la renuncia a su ciudadanía estadounidense a cambio de quedarse en Cuba.
Existe la leve posibilidad de que la petición de González, de ser aprobada, podría ayudar en la petición de Washington de liberar al contratista Alan Gross, condenado en Cuba a 15 años de cárcel acusado de hacer instalaciones ilegales de Internet a grupos de judíos.
El gobierno cubano ha hecho repetidas alusiones a un posible intercambio de sus cinco agentes por el contratista, pero Estados Unidos ha rechazado la idea alegando que los casos son diferentes y ha exigido que Gross sea liberado incondicionalmente.
El canciller cubano, Bruno Rodríguez, de visita en Brasil, tampoco dio muestras que la resolución del caso de González pueda afectar el estatus de Gross en vista de que no abarca a los otros cuatro agentes aun presos en Estados Unidos.
Rodríguez explicó que González ya pagó su sentencia, mientras que Gross, preso desde diciembre del 2009, aún no la ha cumplido. "Es un caso de aplicación de la ley. No veo ninguna relación por tanto entre los dos casos", agregó en Brasilia.
González fue el primero en completar su condena en el 2011, pero debía cumplir tres años de libertad supervisada en territorio estadounidense. No obstante, viajó a Cuba el 22 de abril con un permiso temporal para asistir al funeral de su padre y el viernes pasado expresó su deseo de quedarse.
Existe la leve posibilidad de que la petición de González, de ser aprobada, podría ayudar en la petición de Washington de liberar al contratista Alan Gross, condenado en Cuba a 15 años de cárcel acusado de hacer instalaciones ilegales de Internet a grupos de judíos.
El gobierno cubano ha hecho repetidas alusiones a un posible intercambio de sus cinco agentes por el contratista, pero Estados Unidos ha rechazado la idea alegando que los casos son diferentes y ha exigido que Gross sea liberado incondicionalmente.
El canciller cubano, Bruno Rodríguez, de visita en Brasil, tampoco dio muestras que la resolución del caso de González pueda afectar el estatus de Gross en vista de que no abarca a los otros cuatro agentes aun presos en Estados Unidos.
Rodríguez explicó que González ya pagó su sentencia, mientras que Gross, preso desde diciembre del 2009, aún no la ha cumplido. "Es un caso de aplicación de la ley. No veo ninguna relación por tanto entre los dos casos", agregó en Brasilia.
González fue el primero en completar su condena en el 2011, pero debía cumplir tres años de libertad supervisada en territorio estadounidense. No obstante, viajó a Cuba el 22 de abril con un permiso temporal para asistir al funeral de su padre y el viernes pasado expresó su deseo de quedarse.
