Haciendo una aclaración a la prensa sobre sus palabras de hace poco más de una semana en un acto de recaudación de fondos en Virginia Occidental, Boehner dijo en el Capitolio que lo que en verdad trató de decir es muy sencillo.
“Las elecciones de noviembre van a ser un referendo sobre las fallidas políticas económicas del presidente, que han hecho que la economía esté mal, no han funcionado y realmente la han hecho empeorar, de modo que va a ser un referendo. Y yo saldré con entusiasmo a apoyarlo (a Mitt Romney)”, señaló.
Según analistas, lo que le pasó a Boehner es lo mismo que le ha sucedido a otros dentro de las filas republicanas, y que a lo largo de meses ha sido un susurro a voces: les gusta Romney lo suficiente, pero en verdad su voto es más contra el presidente Barack Obama.
Aludiendo al anuncio hecho por Obama de preservar las rebajas de impuestos sólo para los estadounidenses que ganen menos de $250.000 dólares al año, el congresista republicano por Florida Allan West dijo que el país ha llegado a un punto en que “cualquier cosa es mejor que lo que tenemos actualmente”.
De hecho, una encuesta de The Washington Post/ABC difundida este martes reveló que el 37 por ciento de quienes respaldan a Romney votarían por él como presidente en razón a sus méritos, mientras que el 59 por ciento dijo que lo haría para sacar a Obama de la Casa Blanca.
Para el representante republicano por Georgia Lynn Westmoreland se trata de que “en la mayoría de los casos la gente más ansiosa por ir a las urnas es la que votará contra Obama con independencia de quién es él (..) estoy seguro de que hay gran cantidad de demócratas que no están ahora enamorados de Obama”, dijo.
Al congresista republicano por Utah Jason Chaffetz, un temprano partidario de Romney, no le preocupa el asunto en lo absoluto “con tal de que (los electores) voten por él”. Según Chaffetz, los votantes “se enamorarán (del republicano) una vez que sea presidente”.
En cambio, para el representante por Texas Jeb Hensarling, quien una vez presidió el Comité de Estudio Republicano, sí es cuestion de enamorarse. “Cuando veo lo que Obama ha hecho a mi país, no tengo problemas con enamorarme de Mitt Romney”, indicó.