El secretario ejecutivo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, Emilio Álvarez Icaza, dijo a la Voz de América que ha habido una reacción positiva a las advertencias de que el organismo defensor de los derechos encara una crisis económica para cumplir con sus funciones.
“Yo veo preocupación. He recibido llamadas de cancillerías, de embajadas, de expresiones de la sociedad civil, y me parece que el horizonte a trazarnos es la respuestas positiva”, dijo Álvarez.
La Comisión anunció esta semana que ha suspendido audiencias y tendrá que despedir al 40% de su personal si no consigue fondos adicionales antes del 15 de junio.
“Vamos a entender que se trata de una crisis de crecimiento, esa es la apuesta de la Comisión, porque no quisiéramos tener que explicarles a las víctimas que no podemos responder porque no hay abogados que tomen sus llamadas”, apuntó a la Voz de América.
“Sin la CIDH nuestras democracias pierden un poderoso aliado, las víctimas pierden un espacio, y la justicia de la región pierde esperanza”, agregó.
La CIDH obtiene sus fondos a través de la OEA, que le destina el 6% de su presupuesto, y de donaciones de gobiernos y entidades como la Unión Europea, pero este año esos recursos se han reducido drásticamente.
Los estados miembros de la OEA asignan unos $5 millones de dólares para un organismo que requiere seis veces esa cifra, según, Álvarez, pero ahora tendrán que decidir aportar más para apoyar a la Comisión, que ellos mismos han creado.
La CIDH ha sido blanco de ataques de algunos estados que han pedido su abolición o cuando menos, su cambio de sede, y ahora podrían tratar de asfixiarla económicamente.
“Hay dos tipos de fenómenos” –explica Álvarez a la VOA. “Hay acciones de ataque o de asedio por acción. Aquellos países que con su narrativa muy agresiva en contra de la Comisión… no quieren llegar al fondo, atacan al mensajero en lugar de atender el mensaje. Y hay otro tipo de circunstancia que es por omisión, que eventualmente puede ser una condición de asfixia”, agrega.
“Es un tema de congruencia, la Comisión fue creada por estos estados que firmaron tratados, y acuerdos… por lo que hay que ponerle dinero Comisión”, concluye Álvarez.
