Enlaces para accesibilidad

Cuba: cardenal se reúne con Damas de Blanco


La líder de las Damas de Blanco, Berta Soler, habla con la prensa luego de reunirse con el cardenal.
La líder de las Damas de Blanco, Berta Soler, habla con la prensa luego de reunirse con el cardenal.

Jaime Ortega, también arzobispo de La Habana, ha sido fuertemente criticado por la oposición, que lo acusa de favorecer las opiniones del gobierno de Raúl Castro.

El cardenal Jaime Ortega se reunió este jueves en La Habana con varias Damas de Blanco que se quejaron de no haber sido recibidas por el papa Benedicto XVI durante la visita que éste hizo en marzo último a la isla, cuando en cambio el pontífice sí accedió a reunirse de manera imprevista con el ex gobernante Fidel Castro.

La reunión que duró más de tres horas fue un diálogo “muy abierto”, según la líder del grupo Berta Soler. “El cardenal fue muy receptivo, nos escuchó, también le recordamos la carta que dejamos para que él interceda ante su santidad, Benedicto XVI, para una audiencia en el Vaticano con una representación de las Damas de Blanco", dijo.

Soler señaló que las cuatro integrantes del grupo salieron “contentas” de la entrevista y que aunque saben que la libertad de los presos políticos cubanos “no está en manos del cardenal” sino del gobierno de Raúl Castro, ellas van a “seguir tocando las puertas de la Iglesia católica”.

Indicó que su objetivo había sido informar a Ortega, quien es arzobispo de La Habana, que las Damas de Blanco son “llevadas a calabozos” por asistir habitualmente a misa los domingos, y también que la represión gubernamental contra ellas se ha recrudecido.

Además le mencionaron el caso de dos Damas de Blanco que están detenidas sin haber sido enjuiciadas desde marzo último.

Soler dijo tener confianza en el cardenal y precisó que sólo querían que las escuchara para “que pueda trasmitirlo a Raúl Castro, para por lo menos, aunque no cese la violencia contra las Damas de Blanco, sí pueda disminuir, porque somos mujeres pacíficas".

Disidentes reprochan al cardenal haber privilegiado sus relaciones con el gobierno desconociendo a la oposición, lo que según ellos se hizo más evidente durante al visita del papa.

Las tensiones entre la Iglesia por un lado y los disidentes y exiliados cubanos por el otro, empeoraron un mes después cuando en una conferencia dictada en la Universidad de Harvard, en Boston, el prelado calificó de delincuentes a varios opositores que fueron desalojados de una iglesia en La Habana.

El cardenal medió con las autoridades de la isla en 2010 en virtud de lo cual fueron excarcelados más de un centenar de presos políticos, pero fue acusado luego de “prestarse” a que la gran mayoría de ellos fuesen deportados a España.

La Iglesia dijo después que la salida de los prisioneros había sido por voluntad de ellos mismos y a petición de las Damas de Blanco.

Antes de entrevistarse con Ortega, las damas pudieron dialogar hace dos semanas con Dionisio García, arzobispo de Santiago de Cuba, y también con el canciller de la arquidiócesis de la Habana, Ramón Sánchez Polcari, en medio de una avalancha de críticas de la oposición contra el cardenal tras sus declaraciones en Harvard.

De acuerdo con testigos, Sánchez Polcari echó en cara en esa ocasión a las Damas de Blanco el haberse convertido en un movimiento políticó, cuando originalmente sólo eran un grupo de esposas y familiares pidiendo la libertad de 75 opositores condenados a largas penas de cárcel durante la Primavera Negra de 2003.

XS
SM
MD
LG