Continúa la ofensiva
Alepo sigue inmersa en un intenso combate entre las fuerzas gubernamentales y los rebeldes, unas luchas que comenzaron en la madrugada de este miércoles 8 de agosto con la ofensiva terrestre del régimen en el barrio de Saldino, uno de los principales bastiones de los opositores.
De acuerdo con el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), 167 personas fallecieron este miércoles como consecuencia de los enfrentamientos, de los cuales 33 perecieron en la capital norteña.
Según la misma fuente, en la mañana de este jueves el ejército sirió seguía bombardeando varias zonas de Alepo, entre las que se encuentran los barrios de Hanano, Al Sajur, Chaar y Seif Dawla.
20 horas de combates han obligado a los rebeldes a retirarse parcialmente del barrio de Saldino, como confirmó un comandante rebelde. Esta facción asegura que un refuerzo de 700 rebeldes, sin embargo, ayudó a contener el avance de las fuerzas gubernamentales, que en la mañana del jueves también obtuvieron refuerzos a través de varios convoyes con centenares de soldados, como explica el OSDH.
Mientras tanto, cientos de ciudadanos sirios continúan huyendo a la frontera con Jordania, a donde se ha enviado un avión de la Fuerza Aérea francesa con personal médico que establecerá un hospital de campaña para atender a los refugiados qu previsiblemente estará instalado este fin de semana en su totalidad.
El avión, un Airbus 1310, transporta una cincuentena de expertos y técnicos médicos de las Fuerzas Armadas y 20 toneladas de equipos y medicamentos; e incluye un veterinario y un especialista en epidemias dentro del equipo de cirujanos, enfermeros y anestesistas.
“Esperamos una misión difícil y complicada por lo desconocido. Sabemos lo que tenemos que hacer, pero es necesario adaptarse todos los días a situaciones nuevas”, afirmó el jefe médico de la aeronave, Gérard Dosseh.
Entretanto, el presidente sirio, Bashar al-Assad, nombró este jueves como primer ministro a Wael al Halqi (antiguo ministro de Salud), según la televisión estatal, en sustitución de Riad Hijab, que el pasado lunes 6 de agosto desertó de su cargo y huyó a Jordania junto a su familia.
En las últimas horas otra persona cercana a al-Assad ha abandonado también su cargo. Se trata de Muhiddin Maslamani, jefe de protocolo del palacio presidencial sirio que, aunque aún no ha abandonado el país, ya se ha unido al bando rebelde y rechazado el régimen, según el canal de televisión Al Arabiya.