Noticias procedentes de Francia indican que la nave de Air France que se estrelló el lunes en aguas del Oceáno Atlántico pudo haber estado volando muy lentamente durante las fuertes tormentas tropicales que aparentemente derribaron el avión.
Todas las 228 personas a bordo del vuelo 447 se presume que estén muertas. El avión volaba de Río de Janeiro a París, cuando cayó frente a la costa noroeste de Brasil.
El diario parisino Le Monde informó, este jueves, que Airbus, fabricante de la nave siniestrada, se preparaba a enviar un alerta a los operadores de cientos de sus jets A 330, con nuevas consejos sobre los vuelos en medio de las tormentas.
Airbus rechazó comentar sobre ese informe, que cita una fuente cercana a la investigación del accidente y ocurre en momentos en que equipos internacionales buscan más restos de la nave en el Atlántico sur.
En París, testigos dijeron que Air France dijo a los familiares de pasajeros franceses del avión siniestrado que deben abandonar la esperanza de hallar sobrevivientes.