El presidente estadounidense, George W. Bush,
y el mandatario ruso, Dmitry Medvedev, se reunieron al margen de la cumbre del
G-8, en Japón, y prometieron trabajar juntos para la eliminación de la amenaza
nuclear de Irán y Corea del Norte.
Sin embargo, los dos líderes no reconciliaron sus diferencias sobre un
planeado escudo de defensa en el Este de Europa.
La reunión, este lunes, entre Bush y Medvedev fue la primera desde que
el presidente ruso asumiera el cargo, en mayo.
Un asesor del mandatario ruso indicó
que Medvedev dijo a Bush que la idea de establecer una base de misiles
en Lituania es absolutamente inaceptable. El líder ruso también reiteró la
oposición de Moscú a los planes estadounidenses de una base de interceptor de
misiles en Polonia, como así también una estación de radar en la República
Checa.
Estados Unidos ha dicho que el escudo es necesario para proteger a
Estados Unidos y Europa de estados parias.