Grupos de derechos humanos afirmaron que las autoridades de Myanmar, ex Birmania, detuvieron a más de mil personas en una violenta represión contra activistas a favor de la democracia.
La Asociación de Asistencia para los Prisioneros Políticos, con sede en Tailandia, señaló que por lo menos mil monjes budistas y otros 300 manifestantes fueron arrestados la semana pasada.
El grupo, que monitorea de cerca de los detenidos en la ex Birmania, señaló que los monjes fueron obligados a sacarse sus atuendos, vistos como símbolo de estatus en Myanmar.
La Comisión de Derechos Humanos de Asia, en Hong Kong, indicó asimismo que las fuerzas de seguridad de la ex Birmania detuvieron a unos 700 monjes y a 500 civiles laicos y se desconoce su paradero.
Entretanto, el enviado de la ONU, Ibrahim Gambari, se encuentra en Myanmar para impulsar una resolución pacífica al conflicto.
Él está en la nueva capital, Naypyidaw, este lunes, tratando de encontrarse con el máximo líder del país, general Than Shwe.