El secretario de Defensa de Estados Unidos, Robert Gates, llegó a Irak en una visita sorpresiva para evaluar la situación en el país, tras el despliegue de tropas adicionales estadounidenses para tratar de poner fin a la violencia.
Gates informó a reporteros mientras viajaba desde Bruselas a Bagdad, que el gobierno de Estados Unidos está descontento por el lento progreso de Irak en establecer leyes y dar pasos para detener la violencia sectaria.
Este viernes, el Primer Ministro de Irak ordenó un toque de queda indefinido en la sureña ciudad de Basora después que una mezquita sunita fue bombardeada y destruida en Zubair. No se informó de víctimas en la explosión.
Por lo menos otras seis mezquitas sunitas han sido atacadas desde que presuntos militantes de al-Qaeda detonaron explosivos en el sitio religioso chiíta de Askariya en Samarra, el miércoles.
La agencia de la ONU para refugiados informó hoy que muchas personas que huyen de la violencia en Irak se están instalando en sitios temporales -dentro del país- en condiciones pésimas y antihigiénicas. Se calcula que dos millones de personas se encuentran internamente desplazadas en Irak.