El presidente Bush y los líderes de la Unión Europea reconocieron diferencias, pero calificaron como fructífera la cumbre de hoy, miércoles, en Viena.
El canciller de Austria, Wolfgang Schuessel, cuyo país mantiene la presidencia rotativa de la UE, dijo que las conversaciones giraron en torno a Iraq, las ambiciones nucleares de Irán, los Balcanes, energía y una amplia gama de temas económicos.
El presidente Bush elogió a los gobernantes europeos por su cooperación en la edificación de la democracia en lugares como los Balcanes.
También reconoció diferencias pasadas sobre temas como el de Iraq, pero expresó confianza de que el nuevo gobierno de ese país tendrá éxito.
Bush reafirmó la determinación de su gobierno de cerrar la prisión de la Base Naval de Bahía de Guantánamo en Cuba.
Sin embargo, dijo que el esfuerzo no debe conducir a la libertad de personas que todavía pueden hacer daño.
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso elogió el acuerdo con Estados Unidos para comenzar un diálogo de alto nivel sobre el cambio climático.
También expresó confianza en que las diferencias entre Estados Unidos y la Unión Europea sobre comercio mundial puedan aún ser resueltas a pesar de haber vencido varios plazos.