Ochocientos soldados de la Guardia Nacional de Estados Unidos adoptaron posiciones a lo largo de la frontera con México, como parte de una operación orientada a reducir el flujo de inmigrantes ilegales.
Autoridades estadounidenses señalaron que los militares fueron emplazados en Arizona, California, Nuevo México y Texas, para apoyar a la Patrulla Fronteriza, y que iniciarán su labor la próxima semana.
Los funcionarios dijeron que, antes de fin de mes, unos dos mil quinientos soldados estarán emplazados a lo largo de la frontera.
El mes pasado, el presidente Bush anunció un plan para emplazar a seis mil tropas de la Guardia Nacional a la frontera, para ayudar a resguardar el área. El mandatario afirmó que no estarán involucrados en actividades policiales.
La Guardia Nacional realizará labores de vigilancia, análisis de inteligencia, instalará rejas y barreras vehiculares, construirá caminos para las patrullas y proveerá entrenamiento.
México ha expresado inquietud respecto al emplazamiento de la Guardia Nacional y la construcción de barreras de seguridad a lo largo de la frontera.
No obstante, el presidente Bush dijo que Estados Unidos no militarizará la frontera sur.