El gobierno de Paquistán describió la muerte del terrorista Abú Musab al-Zarqawi como significativa en la guerra mundial contra el terrorismo.
No obstante, el jefe de al-Qaeda, Osama bin Laden, continúa eludiendo las fuerzas afganas, paquistaníes y estadounidenses.
Aunque la muerte de al-Zarqawi es ampliamente considerada en la región como una importante victoria en la guerra que encabeza Estados Unidos contra el terrorismo, una declaración del líder del Talibán en Afganistán, Mullah Mohammad Omar, dice que la muerte de Musab al-Zarqawi no debilitará la lucha contra lo que define como “las fuerzas de las cruzadas”.
El analista militar y general retirado paquistaní, Talat Masood, expresó que, ahora, lo que podría ocurrir es que se haga mas difícil capturar a otros líderes de la insurgencia: “No afectará los aspectos operacionales de al-Qaeda en esta parte del mundo. Pero ellos van a actuar con más cuidado y con más desconfianza”.
Masood afirma que Osama bin Laden y sus asociados ya están tomando medidas extraordinarias, para evitar ser detectados.