La secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, dijo que Estados Unidos proveerá ayuda de 10 millones de dólares en medicinas y suministros médicos al pueblo palestino.
La funcionaria declaró a los medios de prensa en Nueva York que el gobierno de Washington está preocupado por las necesidades humanitarias del pueblo palestino. Agregó, sin embargo, que el gobierno dirigido por Hamás debe renunciar a la violencia antes de que pueda ser aliado en el proceso de paz.
Rice hizo la declaración después que el cuarteto de pacificadores del Medio Oriente, Estados Unidos, Rusia, la Unión Europea y las Naciones Unidas, se reunió en Nueva York para discutir la forma de reanudar el proceso de paz de la región.
Autoridades estadounidenses dijeron que la ayuda médica será prevista a través del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia y organizaciones no-gubernamentales debidamente aprobadas.
Estados Unidos y otras naciones occidentales congelaron la ayuda al gobierno conducido por Hamás porque el grupo no quiere renunciar a la violencia ni reconocer a Israel.